Una de las motivaciones que nos mantiene en resistencia es el enfrentamiento a vivir una vida de vulneraciones y precarización, por lo tanto, hemos decidido unirnos, protegernos y cuidarnos de la competitividad e individualismo a través de nuestra Comunidad Sorora, de esta forma, nuestra bandada de pájares nos permite ir constantemente problematizando los cánones, responsabilidades y criminalizaciones que se nos han imputado por ser mujeres.
Esto, nos ha hecho desarrollar una serie de estrategias para la sustentabilidad de autocuidados feministas: economía solidaria, educación emocional, encuentros de la comunidad sorora, apoyo psicosocial jurídico, espacios de contención, entre otras intervenciones que promuevan el fortalecimiento de la salud mental individual y grupal, reuniéndonos en modalidad presencial y/o virtual a medida que las condiciones lo ameriten, apoyándonos dentro de las dificultades de acceso tanto a medios digitales como físicos.